En pocos sitios del mundo se vive el fútbol como en Sevilla, donde juegan dos de los equipos con más historia de España y el mundo. Los amantes del deporte rey también practican otro tipo de deportes derivados de este, pues el fútbol burbuja en Sevilla cuenta con buena cantidad de aficionados y jugadores, aunque lleva poco tiempo disponible.
Los sevillanos son futboleros por naturaleza, y tanto las derrotas como las victorias de los equipos de la ciudad marcan en muchas ocasiones hasta el trato que tienen algunos vecinos con otros. Hay hasta familiares que se han dejado de tratar simplemente porque uno no le perdona al otro que sea de su máximo rival.
Sevilla y Betis: historia de una rivalidad fratricida
Cuando se habla de Sevilla y de fútbol, todo el mundo tiene en la cabeza los nombres de dos equipos: Betis y Sevilla, históricos rivales cuyas luchas se han llevado a un nivel mucho más alto que las que pueden haber tenido Real Madrid y Atlético o Barcelona y Español. Se puede decir que incluso los dos máximos y encarnizados rivales de la Liga española, Barça y Madrid, han tenido un trato más cordial que el que han tenido a lo largo de toda su historia los dos equipos sevillanos.
Es algo curioso teniendo en cuenta que ambos clubes tienen su origen en un mismo equipo, algo que no quieren recordar nunca.
Los aficionados de Sevilla y Betis viven los colores de su equipo con tal fervor, que hay incluso chistes y hasta insultos personalizados entre ambos. Los béticos pueden llegar a llamar sevillista a alguien al que tengan mucha manía o al revés, como si fuese lo peor que se les puede decir. Alguna vez incluso han celebrado el descenso de categoría de sus rivales o sus derrotas.
Polémicas aparte, lo cierto es que ambos equipos han dado muy buenos momentos, no solo a sus aficionados sino a todos los amantes del fútbol en general, además de llevar varias de sus estrellas a las selecciones nacionales de medio mundo.
Algunas anécdotas curiosas
El anecdotario futbolístico está lleno de episodios en los que los protagonistas son uno de estos dos equipos de Sevilla. Una de las más sonadas tiene que ver con la iluminación y decoración de la portada de la Feria de Abril, otra de las actividades que hacen de Sevilla una ciudad muy conocida, aparte del fútbol.
En el año 2005, cuando el Sevilla F.C. celebraba su centenario, Sevilla decidió dedicar la portada de la Feria al Sevilla como homenaje por su aniversario. Para ello se incluyeron algunos detalles que recordaban los 100 años junto a los colores del club. Sin embargo, y aún no se sabe cómo, en uno de los dibujos que decoraban la portada se “soló” un escudo del Betis, algo que para algunos no fue más que una anécdota, mientras que otros lo atribuyeron a la envidia o la inquina de algún trabajador forofo del Betis que no se contentaba con hacer el homenaje. El presidente del Sevilla en esos momentos trató de verlo como una muestra de la unión entre los dos equipos, aunque unas declaraciones posteriores fueron interpretadas como un desprecio.
Sevilla y Betis, dos clubs de futbol históricos
Dos años después era el Betis el que cumplía sus 100 años, aunque renunció a que se destacara este hecho en 2007 en la puerta del Real de la Feria. Algunos comentaron que se debió a la polémica suscitada dos años atrás, aunque la versión oficial nunca aclaró el hecho.
Una junta de accionistas del Betis celebrada en 2015 tuvo también una anécdota que merece la pena destacar. En ella, con el fin de hacer una prueba de los mandos que se utilizaban para votar y aprobar los puntos del día, se utilizó una pregunta bastante sorprendente: “¿Quiere que el Sevilla gane el derbi del sábado?”. Teniendo en cuenta que todo el mundo allí es del equipo verdiblanco, lo natural habría sido que un 100% de las respuestas fuera un “NO” rotundo, pero en cambio hubo un 0,5 por ciento de accionistas que votaron “SI”, mientras que se abstuvieron un 0,1. Las risas no se hicieron esperar, y se achacó a algún socio bromista, aunque no todo el mundo quedó del todo conforme.
En 1918 se enfrentaban Betis y Sevilla, pero el Betis se negó a jugar sin dos de sus jugadores que tenían guardia en el cuartel justo el día del partido. El Sevilla se enfrentó a un equipo infantil al que marcó 22 goles sin recibir ninguno, y al final de la temporada curiosamente los dos béticos que no podían estar ficharon por el Sevilla.
En cualquiera de los casos, la eterna rivalidad que tienen estos dos equipos y sus aficionados obedece claramente al modo en el que los sevillanos viven sus aficiones, una de las cuales es sin duda el fútbol, deporte que mueve a las masas en cualquier rincón del mundo, pero que en Sevilla lo hace con más ahínco si cabe.